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Después de una ruta por Costa Rica de casi 2 semanas nos dirigimos hacia Guanacaste con la intención de descansar unos días. La región es menos tropical, húmeda y exuberante que el resto del país, con praderas, bosques secos y bonitas playas. 

Nos alojamos en el hotel Riu Guanacaste, situado en la zona del Sardinal, en régimen de todo incluido. El hotel ofertado como un 5 estrellas me decepcionó mucho, ya que los servicios e instalaciones dejaban mucho que desear, en comparación con los hoteles de estas características en otros países como Mexico, Cuba o República Dominicana. No obstante, decidimos aprovechar bien los días que nos quedaban para realizar diferentes actividades.

Lo mejor del hotel fue poder descubrir la cantidad de animales que viven en los alrededores. Desde la ventana de nuestra habitación, por la mañana y a primera hora de la tarde, podíamos observar a numerosos monos aulladores en los arboles de enfrente. Es increíble verles saltar y escuchar los escandalosos sonidos que emiten!. Además, tanto en la playa, como en la piscina las iguanas y los garrobos campan a sus anchas ajenos a los turistas, y en el mar puedes bañarte mientras los pelícanos están pescando a tu lado.

La playa de Matapalo es la más cercana al hotel (desde la que se accede directamente). Es limpia y segura, y te permite realizar diferentes actividades. Nosotros el primer día decidimos alquilar una moto acuática con la cual pudimos disfrutar de un paseo muy divertido por 50 dólares la media hora.

Caminando a lo largo de la playa, llegando al final, aparece una zona boscosa con mucha vegetación donde se encuentra un mercadillo artesano, y lugareños que ofrecen diversas actividades recreativas a buen precio, como quad o paseos a caballo. Yo tuve la oportunidad de disfrutar de uno por el bosque y la playa por muy pocos dólares, que me encantó!.

Pero lo mas impresionante de esta zona es ver en los arboles a los monos carablanca que se te acercan para que les des de comer algo de fruta, especialmente a primera hora de la mañana. 

Al día siguiente optamos por hacer una excursión de aventura en quad atravesando ríos empedrados, varios pueblos pintorescos y las playas de Tamarindo, playa Coral y playa Blanca donde nos dimos un bañito. Fue una experiencia super emocionante!.

Por ultimo, nos animamos a hacer submarinismo por primera vez. La experiencia resultó muy interesante, pero al final yo no fui capaz de sumergirme en el mar, aunque mi marido y mi hijo obtuvieron su primer diploma de iniciación.

Definitivamente Guanacaste deja huella, por que te permite disfrutar de la naturaleza al 100%.

Qué pasa chavales!
  • Aunque teníamos intención de descansar unos días, no dejamos de hacer actividades en plena Naturaleza.
  • Trata de contratar los servicios en la playa, y no en las agencias, ya que podrás negociar mejor los precios, y favorecerás el mercado local.
  • Si vas a dar de comer a los monos, dales solo fruta, nunca comida elaborada porque les vas a perjudicar.  
  • Sino lo has hecho nunca, atrévete a iniciarte en el submarinismo. Nuestro monitor René de ScubaCaribe fue excelente e hizo que me comenzara a picar el gusanillo.
  • Vas a flipar con los machos de iguana, los garrobos. Hay un montón y son enormes, pero nada peligrosos, al contrario que las hembras.

Y recuerda, más vale humo que escarcha!